Aumento de hormonas del estrés podrían ser “gatillante” de algunos problemas como la coriorretinopatía central serosa. El estrés es una respuesta del organismo frente a lo que podemos considerar una amenaza. En otras palabras, es una reacción fisiológica que nos prepara para la acción, que nos permite estar alerta.
Un día tu hijo despierta y te das cuenta que tiene uno o los dos ojos muy rojos. ¿Te ha pasado? El doctor Francisco Conte, oftalmólogo infantil, del Centro de la Visión, te explica en esta nota qué hacer en esos casos y cuándo consultar.
1-Movernos y hacer ejercicio: caminar, running, hacer cualquier tipo de deporte (tenis, fútbol, baloncesto, nadar, danza, judo…).
Asegúrate de que tus lentes tienen filtro UV.
El sol es peligroso y más aún en verano, cuando la radiación es más que el triple que en el invierno, por lo que, además del daño a la piel, también puede provocar daño en tus ojos.
Con la primavera aumenta la concentración de alérgenos en el ambiente, y con esto enfermedades como la conjuntivitis alérgica, picazón, ardor ocular y la sensación de un cuerpo extraño en el ojo son algunos de los síntomas que pueden alertar de la presencia de conjuntivitis alérgica, una enfermedad ocular que se presenta como reacción a en el ambiente.
La retinopatía diabética es la principal manifestación del compromiso ocular secundario a la diabetes. En Chile es la primera causa de ceguera irreversible en edad laboral por lo que constituye un importante problema de salud pública.