La intervención ha evolucionado otorgando resultados óptimos y seguros, además de una rápida recuperación.La miopía, astigmatismo y la hipermetropía son ejemplos de defectos refractivos, situaciones en las que, por mal funcionamiento óptico, el ojo no es capaz de proporcionar una buena imagen. Estos defectos son comunes en la población y tiene solución definitiva con cirugía.
Entre ellas, la cirugía Lasik es una de las alternativas para la corrección quirúrgica de estos vicios de refracción. El DR. CRISTIAN ANDRES GREENE PEREZ, oftalmólogo del Centro de la Visión; especialista en córnea, catarata y cirugía refractiva, explica que la cirugía Lasik consiste en utilizar un láser del tipo Excimer para cambiar la forma y poder de la córnea, según el grado del vicio de refracción de cada paciente, lo que les permite dejar de usar lentes.
“La cirugía consiste en realizar un corte superficial en la córnea, lo que permite levantar un flap de tejido corneal para acceder al llamado estroma corneal, o tejido algo más profundo que es donde se realiza el láser en sí, y la modificación de la forma corneal”, señala el especialista.
Se trata de una cirugía segura y con resultados efectivos. Los avances de los últimos años, permiten lograr efectos cada vez más precisos y con un bajo riesgo de complicaciones, debido a la forma en que los especialistas realizan el corte inicial en la córnea para lograr la creación del flap.
“Este corte, durante muchos años, se realizó con un microquerátomo (micro-cuchillete automatizado). Actualmente, cada vez más centros están transicionando a realizar este corte con un segundo láser, llamado láser de femtosegundo, lo que permite incrementar aún más la seguridad de la cirugía e, incluso, realizarla en pacientes que antes no eran candidatos por la forma de su córnea”, explica.
La ventaja de esta cirugía frente a otras alternativas refractivas, es que permite una rápida recuperación visual y casi no provoca molestias oculares después del primer o segundo día posoperatorio.