En algunos casos no es necesario trasplantar una córnea completa para que el paciente recupere la visión normal. La queratoplastía o injerto de córnea, es el reemplazo de una córnea patológica (la parte anterior transparente del ojo) por una sana proveniente de un donante.
Un problema en la córnea puede ocurrir por la pérdida de su integridad estructural o deformaciones como queratoconos, altos astigmatismos, opacidades, así como cicatrices secundarias a traumas, infecciones, causticaciones, entre otros, explica el doctor Miguel Srur, oftalmólogo del Centro de la Visión.
“La córnea se puede cambiar en toda su estructura o sólo la porción afectada, permitiendo al paciente recuperar una visión normal. Las córneas donantes actualmente provienen de bancos de córnea de USA, lo que permite hacer estos procedimientos en forma continua y programada”, sostiene.
La cirugía dura aproximadamente una hora y es ambulatoria. “Actualmente se han realizado importantes avances e innovaciones en la técnica de la queratoplastía, permitiendo que únicamente sea trasplantada la porción de córnea alterada”, indica el oftalmólogo.
La cirugía depende en función de si la porción a reemplazar es la región central de la córnea, o una porción parcial de la superficie anterior o posterior. ¿Cuáles son las diferencias de queroplastía?
• Queratoplastía penetrante: Se reemplaza la porción central de la córnea en su totalidad.
• Queratoplastía lamelar anterior profunda (DALK): Se sustituyen las capas anteriores de la córnea conservándose el estroma corneal más profundo, el endotelio.
Queratoplastía lamelar posterior o endotelial (DSAEK, DMEK): Se reemplaza únicamente las capas posteriores de la córnea.
“El hecho de que se pueda reemplazar únicamente la porción de la córnea alterada permite incrementar las expectativas de éxito de la intervención, como así mismo reducir algunas complicaciones postoperatorias”, dice el especialista.
La introducción de un nuevo láser (VISUMAX de Carl Zeiss), permite mayor precisión en el procedimiento y mejores resultados ópticos. “El tallado de la córnea donante y receptora se pueden determinar en micrones, tanto en su profundidad como en su diámetro, y permiten a la vez un centrado más exacto. Esto es importante desde el punto de vista de los resultados, permitiendo una mayor exactitud”, explica el oftalmólogo especialista del Centro de la Visión.